Siglo XVIII

1753: En el cabildo celebrado el día 2 de febrero la archicofradía estudia la posibilidad de establecerse en la capilla de Nuestra Señora de la Piedad (actual Baratillo), habida cuenta de los problemas que tenía con la comunidad religiosa del colegio de San Francisco de Paula, ofreciéndose a realizar obras para su ampliación. En la Junta celebrada el día 18 del mismo mes y año acuerda desestimar la propuesta anterior y decide labrar capilla propia en el barrio de la Carretería.

1753: La construcción de la capilla comienza el 23 de septiembre en un almacén y casas que la hermandad había comprado, siendo solar, al Cabildo Eclesiástico en la calle Real del Barrio de la Carretería, según escritura pública de fecha 19 de junio de 1754. Iniciada la obra por Francisco Rodríguez en un principio, se contrata a D. Juan Núñez, maestro mayor de obras de la Catedral, quien aportó planos, diseño y supervisó las obras.

1756: El 30 de mayo el gremio de Toneleros propone a la hermandad que acepte su patronato, formalizándose el mismo al año siguiente, comprometiéndose los maestros toneleros a pagar un tributo a la cofradía y ayudarla en la construcción de la Capilla. La archicofradía se obligaba a prestar asistencia religiosa y enterramiento a los componentes del gremio. El patronato oficial es aprobado por el Arzobispo de Sevilla, el día 27 de junio de 1761.

1761: Se bendijo el 15 de agosto, solemnidad de la Asunción Gloriosa de María Santísima. Con licencia del Prelado, bendice la capilla el Presbítero y Mayordomo de la Cofradía Juan Félix de Oviedo. Se realiza el traslado desde el convento de San Francisco de Paula a su nueva capilla en una solemnísima procesión, a la que acompañan unas fiestas realizadas entre los días 14 y 18 de agosto de aquel mismo año.

1788: Con motivo de la proclamación como Rey de España de Carlos IV, se erigen en la ciudad multitud de arcos triunfales. La hermandad monta uno de carácter efímero y gran vistosidad en la plaza de Santa Marta en el mismo interviene el destacado pintor Francisco Ximénez. Finalizadas las fiestas, se recupera del arco una pintura de grandes dimensiones que está instalada actualmente en el coro de nuestra capilla.

1790: El 8 de mayo renovó sus Reglas que les fueron aprobadas por el Supremo Consejo de Castilla.

1791: Mantiene pleito con la Cofradía de la Santa Cruz y la Virgen del Rosario, en la capilla de la Resolana, sobre la antigüedad de ambas, siendo el resultado del mismo favorable para la Archicofradía de las Tres Necesidades.
Asimismo, aquel año mantiene el famoso pleito con la del Gran Poder que habrá de durar hasta 1798. A consecuencia de dicha disputa legal ambas cofradías están a punto de extinguirse. La causa de la misma fue el lugar a ocupar en la Madrugada del Viernes Santo. El problema transcendió de la Jurisdicción Ordinaria e intervino el Supremo Consejo de Castilla que decidió el 23 de septiembre de 1798 la extinción de ambas cofradías, ordenando que les fuesen retiradas sus capillas respectivas, las alhajas, imágenes, ornamentos y todas las propiedades. El pleito quedó solucionado definitivamente mediante una Escritura de Concordia entre ambas hermandades. Consistía la misma en la alternancia en el orden de estación de penitencia cada año. Por ello, el Consejo de Castilla decide invalidar el mandato de extinción y de esta forma cada hermandad pudo recuperar sus bienes.

1800: Para rogar por la desaparición de la epidemia de fiebre amarilla que asola Sevilla, la hermandad organizó unas procesiones pro-rogativas durante tres noches; la primera visitó San Laureano, la segunda San Roque y la última San Sebastián.