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Carretería - Cuaresma, 2013
PRóxImA APARICIóN EDIToRIAL

“Dios, hombres, ciudad:
Historia de la Hermandad de la Carretería”

UN LIBRo CoNCIENZUDo PARA UNA

HISToRIA APASIoNANTE

Diez años de trabajos están a punto de dar traídas en el proceso de elaboración del libro
su fruto. tenemos una gran cofradía, con una que, Dios mediante, verá pronto la luz, fuera
historia a su medida. Durante esta década he de toda duda y notoriamente reforzado. La
intentado investigar y capilla de los toneleros
descifrar cuanta docu- era el primer y el último
mentación pudiera sub- templo en el que se po-
sistir en nuestros archi- día rezar al embarcarse
vos de cara a reconstruir rumbo al Nuevo Mundo
lo que en el fondo es una o al arribar desde él. Si
vida, la biografía de un añadimos a ello que el
personaje pluripersonal puerto de Sevilla poseía
que hunde sus raíces en el monopolio de la Ca-
el culto rendido por unos rrera de Indias mediante
muchachos a una imagen la Casa de Contratación,
mariana de gloria, allá en nos daremos cuenta de
los primeros trechos de la que cualquier viajero
actual calle adriano y en europeo que quisiera
unos años indetermina- navegar hacia américa
dos del siglo XVI. O tal o cualquiera que consi-
vez fuera antes, cuando guiese el retorno, tenía
los toneleros crearon un un mismo lugar de ora-
hospital y cofradía en el ción allende las murallas
barrio de La Carretería, de la ciudad: la iglesia del
con el arenal por delante. hospital de San andrés
Precisamente ésta aRCHIVO de la HeRMandad y San antón, del gremio
de la antigüedad es una de los toneleros.
cuestión que gravita so- es fácil, a partir de
bre todo el libro que den- ahí, deducir la categoría,
tro de poco saldrá de la cuantitativa y cualitativa,
imprenta. La documentación consultada nos de la cofradía cuya historia hemos preparado,
ha dado una gran alegría: un salto de 74 años valiéndonos siempre de fuentes originales y
en la fecha constatada de veteranía para la co- procurando “escuchar” la voz de nuestros pre-
fradía de los toneleros. a partir de ahora podre- decesores en el culto a Dios y a su Madre, así
mos sentir la satisfacción de pertenecer a una como en el ejercicio de la caridad que campea en
corporación cuya edad se aproxima mucho al nuestro escudo. a la vuelta de un tiempo que es
medio milenio. de esperar sea corto, tendremos el libro, y con él
el peso específico de la hermandad de la tan glorioso pasado, en nuestras manos.
Carretería queda, tras las informaciones ex- Ángel Pérez Guerra

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