Page 14 - Boletín 166
P. 14
Priostía
Siempre he pensado que a una hermandad se entra por la priostía. Desde joven te acercas
a ella con ganas de ayudar y participar en el montaje de altares y pasos y no pensando en echar
una mano en mayordomía o secretaría (Que nos perdonen los aludidos.) Para ello es
necesario que alguien te abra las puertas, te acoja y te enseñe a vivir ese emocionante mundo
de la Priostía.
En nuestro caso nuestros maestros fueron Mariano, Bernardo, Antonio Gago y Pepe
Santoveña. Dos ya se encuentran en la Casa del Padre, de los otros dos aún seguimos
recibiendo con mucho agrado sus sabios consejos. De ellos heredamos ese estilo que tanto
nos caracteriza y lo más importante y que sólo un Carretero puede transmitir: amar y respetar
a la Carretería. Esperamos ser dignos sucesores suyos y trasladar sus enseñanzas a esta savia
nueva que actualmente tenemos.
Para nosotros es una tremenda alegría ver en la priostía a los hijos de los que en su día
formábamos parte de la juventud, así como también a todos los hermanos que sintiéndose
atraídos por la hermandad siembran raíces en ella. La priostía es una asignatura obligatoria
para entender qué es la Carretería.
Desde aquí nuestro recuerdo para los que ya no están con nosotros, y en especial para
Antonio Gago que nos ha dejado recientemente. Que el Stmo. Cristo de la Salud y Nuestra Sra.
del Mayor Dolor los protejan.
Te esperamos en la Priostía.
14